agridulce...

Esa sensación fluye por mi en su viaje a través del universo. Se topa con pequeños y desconocidos átomos de recuerdos y los absorve en su camino como las palabras lo hacen con los pensamientos. Y se curva, y gira, y vuelve a la linealidad y escapa caprichosamente en forma de riachuelo, resbalando sobre aquello que queda en el suelo, debajo de lo quedada en el cielo, atravesando tu luz, dejando un rastro de color indescriptible, de olor rápido. Solo me da tiempo a arrepentirme de los errores y volver a surcar el espacio. Necesito volver a salir, descansar, volver a reir sin miedo a los recobecos, a los sonidos familiares y a esos pequeños recuerdos de niño, a esos errores en el pasado. Quiero luchar contra aquello que ya gané y quiero sentir quello que ya es conocido y lo rechazo. No sé cuál será mi destino, ni que camino seguira la resbaladiza agua en el vacio del aire. Por eso solo quiero dormir con mis errores y utilizarlos de almohada hasta que mañana me los vuelva a cargar sobre mi.